La Toxina Butolínica, o comúnmente conocida como Bótox® , es una sustancia biosintética usualmente empleada en el área de la estética para el rejuvenecimiento facial. Esto es posible gracias a la relajación que provoca en ciertos musculos faciales, lo cual permite corregir líneas de expresión dinámicas, para así darle más suavidad a la expresión del rostro.

Alrededor de esta sustancia se han generado una gran cantidad de mitos durante las últimas décadas, principalmente por casos de personajes públicos donde se han empleado otro tipo de sustancias, como rellenos faciales inadecuados, o que han sido manejados por manos inexpertas. Por tal motivo, es de vital importancia aclararte ciertos puntos para que conozcas la realidad sobre esta toxina y pierdas el miedo a rejuvenecer con una apariencia muy natural.

En primera instancia, vale la pena aclarar que el nombre Bótox® es una marca registrada, y al igual que ésta existen otras marcas de toxinas butolínicas que cumplen con las mismas funciones, pero debido a la popularidad que ha adquirido tal marca, el tratamiento ha heredado su nombre y hoy las personas se refieren así a este tratamiento independientemente de la marca usada. Como lo explicamos inicialmente, esta toxina es un componente totalmente biológico (no es quimico, ni sintético) y es secretada por un microorganismo llamado clostridium botulinum. Dicha toxina tiene la propiedad de producir la relajación temporal del músculo estriado (que es el tipo de músculo encargado de los movimientos voluntarios).

Las precauciones que deben tenerse previo a su aplicación, son básicamente, que debes tener tu cara limpia, sin maquillaje, desinfectar con alcohol y aplicar.  Los cuidados posteriores son aún más importantes para evitar complicaciones, y ellos son:  mantener la cabeza mirando hacia al frente, procurando no bajarla, ni tampoco acostarse o permanecer en posición horizontal, durante las proximas 4 horas; no aplicar presion sobre la cara, no masajear, no realizar actividad física durante el mismo tiempo, no consumir alcohol.  Una vez transcurrido este tiempo, puedes continuar con tu vida normal.